Iberia alcanza un preacuerdo con los sindicatos

La reunión entre Iberia y los sindicatos de la comisión negociadora con representación en la compañía (CC.OO., UGT, USO, Asetma, Sitcpla y CTA) en la sede del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) ha finalizado con un preacuerdo para negociar hasta el próximo 31 de enero el plan de reestructuración de la compañía.

Las organizaciones sindicales han descartado realizar la convocatoria de huelgas previstas para enero, aunque advierten de que el pacto sellado con la dirección de la empresa no conlleva la «paz social» definitiva y que, por tanto, podrán recurrir a esta posibilidad durante el transcurso de las negociaciones.

El texto del acuerdo no incluye la mención a los 4.500 despidos que propuso la aerolínea. En cambio, la dirección de la empresa sí acepta aplicar el Expediente de Regulación de Empleo ya abierto en Iberia, que incluye las prejubilaciones como «herramienta prioritaria». Esta fue una petición tradicional de los sindicatos, que iniciaron una «acción sindical coordinada» para exigir esta fórmula de ajuste de plantilla.

La compañía presidida por Antonio Vázquez subrayó en un comunicado que al suscribir este acuerdo «ratifica» su «voluntad de utilizar con carácter prioritario el mecanismo de las prejubilaciones», a las que se podrán acoger «un mínimo de dos tercios del total de excedentes». Tampoco se excluyen otras modalidades, como las «bajas incentivadas, recolocaciones o movilidad geográfica».

Los representantes de los trabajadores que han acudido a la reunión en el SIMA pertenecen a los colectivos de tierra y de tripulación de cabina, no así el de los pilotos (Sepla), que se ha desmarcado de la convocatoria de huelga por encontrarse en un proceso de arbitraje. Así, Iberia ha anunciado que esta semana citará a este colectivo «para que se sume al acuerdo y a la voluntad de negociación que han mostrado los demás sindicatos». También estudiará una de las propuestas formuladas recientemente por el jefe de la sección de Sepla en Iberia, Justo Peral, según la cual los pilotos están dispuestos a rebajarse el sueldo en un 51%.

El acuerdo también contempla un «compromiso de inversión» y «renovación de flotas», el mantenimiento de las rutas de corto y medio radio con el objetivo de convertirlas en «rentables y eficientes», la recuperación de la producción que «realizan otros operadores con código Iberia», un nuevo programa de vuelos, la no segregación de los negocios y la continuidad de la prestación de los servicios de «handling» y mantenimiento hasta 2017.