Fundación Frank y Haydée Rainieri patrocina lanzamiento del cuento ¿Dónde está Eleonora?

La Fundación Frank y Haydée Rainieri, con la colaboración de la Fundación Grupo Puntacana, patrocinó el acto de lanzamiento del cuento ¿Dónde está Eleonora? de la autoría de Saymi Lahoz, que busca instruir sobre la vida de prominentes compositores dominicanos, específicamente de Salvador Sturla, Luis Felipe Alberti, José de Jesús Ravelo y Julio Alberto Hernández, destacando también algunas de sus piezas musicales.

Diseñado para niños y jóvenes del país, el objetivo principal de este proyecto es fomentar la inclusión de la comunidad en situación de discapacidad visual, visión baja y sordo-ceguera, por lo que el cuento se presenta en varias versiones: audible, impreso y en sistema braille, y eventualmente se producirá un video con un intérprete en lengua de señas. Asimismo, el proyecto busca educar, crear conciencia y sensibilidad entre los niños que tienen el privilegio de ver.

El sentimiento que impulsa la creación del cuento es la oportunidad de vender los ejemplares y recaudar fondos destinados para la compra de materiales de alfabetización en sistema braille, con el objetivo de donarlos a niños y jóvenes en situación de discapacidad visual que actualmente asisten a escuelas públicas del país y carecen de los recursos necesarios para obtener dichos materiales.

“Estoy convencida de que, además del amor y la empatía que tanto necesitamos hoy en día, la educación es fundamental para construir un mundo mejor. Por lo tanto, la discapacidad visual no debería constituir un obstáculo para que niños y jóvenes en esta situación dispongan de las herramientas que les permitan recibir una educación de calidad y les garantice oportunidades para un mejor futuro”, expresó Lahoz.

Durante el acto de lanzamiento oficial del cuento, la autora compartió con los invitados las emocionantes aventuras y descubrimientos de Eleonora, acompañada por la interpretación musical en el piano del talentoso artista dominicano Emilio Pineda y por la Banda Imperial de Santo Domingo con sus espléndidos instrumentos, cautivando tanto a los niños y adultos que asistieron al evento. Para dar cierre al mismo, la autora realizó una firma personalizada de libros.