Beyoncé y Jay-Z visitan Dominicana y se hospedan en Casa de Campo

La cantante estadounidense Beyoncé y su marido, el rapero y productor Jay-Z, sorprendieron el sábado con una visita a una discoteca de la capital dominicana, informó hoy el propio establecimiento.

«Porque #SomosEuphoria #JayZ, #Beyonce compartiendo con nosotros!!», escribió la discoteca ‘Euphoria‘ en su cuenta de Twitter, en la que publicó fotos de la pareja.

“Porque #SomosEuphoria #JayZ, #Beyonce compartiendo con nosotros!!”, fue el mensaje publicado en Twitter por la propia cuenta oficial de la discoteca, @ Euphoria_RD, acompañado por un collage de fotos que deja ver a los intérpretes de “Drunk in love”.

La pareja se presentó acompañada por el pelotero Robinson Canó y protegida por miembros de su equipo de seguridad.

Beyoncé  y su esposo se hospedaron en el exclusivo hotel Casa de Campo, en la zona este de la República Dominicana, pero no se han conocido más detalles sobre su visita al país.

En una de las fotos se observa a la cantante con ropa estampada y custodiada; mientras que en otra se ve a su marido con una camisa blanca caminado detrás de ella.

Según sus palabras, Jay-Z quería una discoteca dominicana “con sabor a pueblo” y no una turística o de hoteles.

Beyoncé y Jay-Z no se tomaron fotos con personas del público, pero la beldad sí quiso hacerse una fotografía con dos “sanqueros” que estaban en la discoteca porque le llamaron la atención. “Ella es una mujer muy bonita, morena, con estilo, aunque no andaba en plan de celebridad como tal, sino que estaba muy sencilla y dispuesta a pasarla bien en Euphoria”, dijo Brea Frank al relatar su impresión.

El locutor destacó que Canó convenció a Jay-Z de pasar estos días en República Dominicana, a propósito de su exaltación en el Salón de la Fama del Béisbol Latino. Canó y Jay-Z son amigos desde el 2005 y el estadounidense es su representante.

Las celebrities están en República Dominicana desde el miércoles con su pequeña hija, Blue Ivy.

El jueves almorzaron “rabo encendío”, arroz y habichuela, en un restaurante de San Pedro de Macorís, contó el mismo Canó.