El abogado experto en temas turísticos intervino en el encuentro de Asonahores para analizar el nuevo ambiente laboral en el sector turismo, y explicó sobre los desafíos de las condiciones laborales en el sector turístico desde el ámbito contractual, estacionalidad y jornadas de trabajo.
Citó algunos aspectos que han sido –y de los que aún son– los principales desafíos que enfrento y enfrenta aun el sector de viajes y turismo.
«A los efectos del Covid, sumado a los esfuerzos para lograr que los turistas retomen la confianza de salir a disfrutar de unas vacaciones con prudencia y tomando las medidas sanitarias de rigor, esa lenta apertura de las operaciones se le agrega el luchar con el tema de la estacionalidad; a lo que llamamos temporada baja -el tiempo de las vacas flacas-, en la que el sector enfrenta una merma en la visita de miles de turistas y en las tarifas que pagan creando un impacto económico, en estos momentos, adicional, en las operaciones y de sus empleados quienes también reducen sus ingresos», dino.
De Marchena, agregó que «lo anterior nos ha llevado a recomendar a nuestros clientes en el sector, sobre todo de la hospitalidad, a que rediseñen e inicien un trabajo de concienciación con los empleados; de trabajo en equipo, esfuerzo en conjunto, aplicando de mutuo acuerdo jornadas especiales de trabajo, ya que en muchos hoteles, las ocupaciones solo se veían y aun se ven incrementadas más allá del punto de equilibrio, solo los fines de semanas, con la incorporación de turistas nacionales ya que la entrada de turistas extranjeros al país es aún limitada, debido a las restricciones de viajes de algunos de los principales mercados emisores para la Republica Dominicana, como es el caso de Canadá, Italia, Francia, Alemania, entre otros. En esta modalidad de ocupación no es necesario tener la planilla completa de los trabajadores los primeros días de la semana con los hoteles vacíos».
«Sin embargo, el sector se ha venido recuperando y la apuesta es a la temporada alta que se avecina, 2021-2022, en la cual el sector tiene puestas altas expectativas, un esfuerzo en conjunto empresa-empleomanía, ser eficientes, brindando siempre la confianza al turista y cumpliendo al 100% con las medidas sanitarias dispuestas por el Estado», enfatizó.
Citó el Informe anual de impacto económico del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) que indica que la pandemia supuso un golpe de 33.900 millones de dólares en ingresos perdidos para el sector de los viajes y el turismo del Caribe, lo que redujo la contribución del sector al PIB en un 58%, más que la media mundial. Se perdieron unos 680.000 puestos de trabajo relacionados con el turismo, lo que representa casi una cuarta parte de todos los empleos del sector.
“Para que el sector turístico y hotelero de la región experimente una sólida recuperación, es necesario un mayor apoyo gubernamental para hacer frente a los crecientes gastos operativos, junto con una comunicación y unas relaciones públicas eficaces, un fuerte enfoque en la salud y la seguridad, un compromiso para invertir en los recursos humanos de la región, la asociación y la colaboración, y la mejora de la eficiencia”, manifestó en experto.
Finalmente, indicó «no puedo dejar de resaltar y agradecer el constante y arduo esfuerzo de Asonahores, institución que ha puesto su cuerpo y su alma al servicio del sector turismo y de todos sus miembros, desde el día 1 de la aparición del Covid-19 en nuestro país, institución que vela por el bienestar de todo el sector turismo de la Republica Dominicana».
Gracias por la noticia
Muy buena información
Siempre con noticias muy interesantes