“Al visitante se le debe presentar una ruta saneada”

Durante un encuentro con personalidades del sector turístico, religioso y político, realizado en el Museo de la Altagracia, Frank Rainieri, declaró que «A los turistas no se los va a llevar a Higüey, ni por obligación ni por decreto«.

El empresario realizó estas declaraciones mientras se trataba el tema de la inserción del Museo de La Altagracia y la ciudad de Higüey en las rutas turísticas, en un evento donde también se dieron cita empresarios y comunicadores de la ciudad.

Rainieri expresó que «Al visitante se le debe presentar una ruta saneada, con condiciones de higiene, sin pedigüeños atosigándoles, porque el turista no está acostumbrado a eso y si se siente fastidiado, corremos el riesgo que no regrese» y agregó dando a entender que estas razones son las que se deben tener en cuenta, si se pretende hacer ingresar a Higüey, al circuito de ofertas de excursiones.

En el programa que se emitió el viernes pasado en cadena, desde el mismo museo, se entrevistó a varias autoridades que daban su opinión sobre las alternativas para hacer que Higüey, ingrese dentro de las opciones turísticas, para los millones de visitantes que llegan a Bávaro-Punta Cana y en donde expresaban que se debía obligar al turista a visitar Higüey, y que para esto Higüey debía tener una salida directa a la Autovía del Coral, según publica el portal Puntacana-Bávaro online.

Por parte de los touroperadores se dejó en claro que sin los cuatro pilares, como son seguridad, orden, limpieza y desarrabailización, el turista no los visitará, dejando en evidencia que hasta que estas condiciones no se cumplan, los representantes turísticos, quienes influyen en gran medida sobre el visitante, no lo ofrecerán como alternativa a sus clientes.

Rainieri se comprometió a reunirse en los próximos días con los actores que formarán parte de este nuevo circuito cultural que se planea crear y que es uno de los objetivos planteados y una de las metas para el 2013 en el último FODATUR, que beneficiaría y cambiaría la economía del pueblo de Higüey.

«Depende de toda la comunidad higüeyana, cuidar al turista. De nuestra parte está la voluntad de apoyarles, pero si al turista no se le cuida, éste no va a regresar«, resaltó.

Concluyó destacando que «Higüey, no se ha incorporado a la industria turística, pero no vamos a mirar para atrás, ahora hay que mirar para adelante»

Las palabras de Rainieri dejaron en evidencia la poca previsión tanto de los empresarios locales como de las autoridades comunales, que durante años, tuvieron a un turista cautivo, obligado a pasar sin más alternativas, por sus vías congestionadas y poco seguras.

El Museo de la Altagracia es uno de los sitios que cumple con los requisitos planteados para la visita de los turistas, así como la emblemática Basílica de la Virgen de La Altagracia, pero se debe adicionar otros elementos, para crear circuitos culturales o religiosos, entre los que se destacaron las vías peatonales, baños y sitios de comidas típicas en condiciones de higiene, parqueos para recibir grandes autobuses, entre otros, que deberán tener en cuenta para hacer atractivo el visitarles.