Turismo educado

Es hermoso el turismo, todos los que tengan oportunidad de salir de las cuatro paredes de sus casas e ir a conocer playas, montañas, museos, otros países y culturas, hágalo. Ahora bien, respete el ambiente.

Es maravilloso observar esos paisajes increíbles que nos ofrece la naturaleza o la arquitectura a lo largo del globo terráqueo, pero la falta de educación y respeto hacia el ecosistema, las especies y la integridad de lo que justamente admiramos y pagamos por admirar, es un elemento a observar para tomar las correcciones debidas.

Una reciente publicación del diario británico The Guardian, expone las problemáticas del intenso tránsito de turistas en las Islas Galápagos, el alto índice de mortalidad en los emblemáticos pinzones de manglar.

Galápagos, además de ser uno de los ambientes más frágiles de la Tierra, también es una de las economías de más rápido crecimiento en América del Sur, reportan. El ingreso per cápita es mayor que en cualquier otro lugar del Ecuador. Casi 40.000 personas han hecho su hogar en las islas, atraídos por el turismo, y con ellos han llegado cientos de especies introducidas: las plantas invasoras, cita el diario.

En las declaraciones que diera exclusivamente para arecoa.com, el Embajador de Ecuador en República Dominicana, Carlos López Damm, dijo que a Galápagos solo entran 120 mil turistas al año, justamente por preservar el medio ambiente.

Pero ¿de qué sirven las restricciones si no se toman medidas de seguridad ambiental? como el aceite de motor que dejan en el agua las embarcaciones que llevan a los turistas o la muerte de 10 mil ejemplares de los pinzones por ser atropellados. ¿Qué medidas de control están tomando? fuera de detener las visitas en los 120 mil turistas, si esa cantidad ya está causando daño.

Lo mismo pasa en otros lugares del mundo, el descontrol y la falta de educación ecologista, que las mismas autoridades deben promover, son escasas. Lugares hermosos que corren el riesgo de desaparecer y con ello su productividad.

El descuido y la comercialización desmedida simplemente deterioran nuestro ambiente, ese por el que pagamos para ir a admirar y disfrutar.

Repetimos lo que dijo López Damm, el turismo es educación, desde el colegio, desde la casa, desde las instituciones. Debemos cuidar lo que tenemos, debemos crear conciencia de lo que ponemos en riesgo.

Es cierto, usted paga por visitar y divertirse en los lugares donde vacacionar, exija entonces que ese lugar este en buenas condiciones, respete esas condiciones, respete el planeta, es de todos.