El turismo despega a ralentí

La recuperación del turismo está siendo lenta en nuestro país, mucho más lenta de lo que preveían expertos y autoridades. No es cuestión de ser ni pesimista ni optimista sino de ver la situación con perspectiva realista. Los datos de ocupación y la marcha de las reservas indican que aún no estamos en disposición de lanzar las campanas al vuelo. Se atisba la luz al final del túnel, pero el trayecto hasta la salida se va a hacer un poco largo y tedioso. En este contexto, los ejecutivos del sector turístico manejan unas cifras más objetivas que las de las fuentes oficiales. Son las mismas cifras que tienen sus jefes, pero ni unos ni otros quieren contradecir a las autoridades. Aquí somos muy proclives—genética dominicana— a ver el vaso medio lleno antes que medio vacío, y eso es bueno para afrontar las adversidades. Darnos de vez en cuando un baño de realismo, no obstante, es muy conveniente para abordar los asuntos candentes. Hay más motivos para ser optimistas que pesimistas, sin duda, pero aún no se ha vencido esta ardua lucha del virus. El panorama cambia de un día para otro: la compañía germana Cóndor habla de esperanza en Punta Cana y a las pocas horas el Gobierno alemán anuncia que RD no es un destino seguro. Por tanto, veamos las cosas como son y actuemos con realismo. Y con mucha determinación porque es mucho lo que nos jugamos.