Documento con la propuesta de Asonahores sobre Modificación Tributaria Del Gobierno

Consideraciones generales

ASONAHORES comparte y está comprometida con la meta anunciada por el Presidente de la República, Danilo Medina,  de alcanzar los 10 millones de turistas extranjeros en 10 años, y entiende que es perentorio colocar desde ahora los pilares para lograr ese objetivo en tramos anuales progresivos y consecutivos.

El crecimiento turístico significa, incrementar la disponibilidad de divisas, ampliar el empleo formal, e inducir demandas sectoriales más intensivas hacia agro, la industria, y los servicios. Es encaminar el país hacia la diversificación y el desarrollo. Mejorar la competitividad es uno de los pilares básicos para llegar a la meta, tarea que corresponde tanto al sector privado como al público, en este último caso con el diseño y ejecución de sus políticas fiscal, crediticia, de tasas de interés, tipo de cambio, y sectoriales.

El fortalecimiento en la calidad del servicio, y costos relativos no mayores a los de los competidores más cercanos, son un atractivo para que los turistas elijan el país como destino, y para atraer a los inversionistas hoteleros y de oferta complementaria. De ahí que resulte fundamental ganar incrementos relativos en la competitividad, y no permitir retrocesos.

Reglas claras

Otro de los pilares es mantener reglas claras y estables en el tiempo. La certeza acerca de qué atenerse, es fundamental en la evolución del clima de inversión y de negocio.

El sector turístico entiende que el momento delicado por el que atraviesa la economía, amerita la adopción de decisiones apropiadas. Al mismo tiempo, ASONAHORES está convencida de que la existencia de un fuerte desbalance en las cuentas públicas abre la oportunidad de corregir sus causas de origen, lo que permitirían tomar las medidas correctivas, con visión de largo plazo.

El proceso de ajuste está concebido solo para cuadrar las cifras del déficit, sin adquirir mayor trascendencia; pero ASONAHORES es de opinión que debe superar la visión de corto plazo, e insertarse dentro de una perspectiva de largo alcance, de expansión de la producción expuesta a la competencia y del empleo formal, que es la vía segura de disminuir la pobreza.

Por esta razón ASONAHORES entiende que resulta relevante alcanzar un pacto fiscal mediante una reforma integral, que libere a las finanzas públicas y privadas de cargas pesadas que las afectan, y den solidez a los fundamentos económicos.

Finanzas públicas

La reforma fiscal integral debe solucionar todo lo que afecte a las finanzas públicas, desde la revisión de la estructura tributaria hasta la ejecución de un gasto racional, y fijar límites al endeudamiento ya déficit en procura de mantener una economía sana. También debe incluir la solución simultánea al problema eléctrico, y a la deuda cuasi fiscal.

Es decir, la tarea de consolidar las finanzas públicas no pueden abordarse unilateralmente por via de ingreso tributario, sino considerar sus efectos sobre el ordenamiento económico nacional, asi como todos los aspectos relacionados con el gasto y con el papel del Estado.

En tal virtud, ASONAHORES está en disposición de apoyar, promover, y participar en la conformación, con sentido de urgencia y sin pausa, de un pacto fiscalpara alcanzar un gran acuerdo de nación, que proyecte la economía hacia un mayor potencial.

El paquete tributario

Hechas la salvedades anteriores, ASONAHORES también quiere dejar explicito su parecer sobre el paquete tributario diseñado por las autoridades.

Plan estratégico

El proyecto de aumento de impuestos choca con las propuestas hechas por ASONAHORES al plan estratégico para alcanzar la meta de 10 millones de turista y compromete la sostenibilidad del segmento hotelero en los mercados internacionales, en un entorno de crisis y al no poder traspasar los aumentos en costos al consumidor final, lo que en inmediato es critico porque vamos a una temporada alta ya contratada, que aporta más de 60% de los ingresos.

En efecto genera incrementos de todos los costos que son necesarios para producir el bien que llamamos paquete turístico y oferta complementaria, desde los originados en bienes agrícolas demandados por el sector, hasta industriales, y de servicios, como electricidad, que representan entre el 10 al 15% del costo de los establecimientos hoteleros. Además, daña las perspectivas de inversión en el sector por las figuras impositivas que lesionan la adquisición y traspasos de propiedades turísticas.

A continuación las consideraciones particulares sobre las medidas que mayor impacto tienen en el sector.

Medidas tributarias propuestas con mayor impacto sobre el turismo

A)  Impuesto al patrimonio

El remplazo de IVSS por un IPI de un 1%, consolidando la exención de RD$5 millones por persona, incluyéndolos proyectos turísticos, encarece la opción de adquirir una segunda vivienda, ya sea para disfrute o como inversión, afectando seriamente los proyectos inmobiliario, uno de cuyos componentes más dinámicos es el de la promoción y la adquisición de apartamentos turísticos por parte de nacionales y extranjeros. Por otro lado, afecta destinos deprimidos que persiguen cambiar su situación mediante la diversificación.

Asimismo, el incremento en el impuesto a la trasferencia inmobiliaria de 3% a 4.5%, afecta la inversión inmobiliaria y desalienta el proceso de diversificación de la oferta turística dominicana.

Por otro lado, la eliminación de la exención de impuestos a la transferencia inmobiliaria a los adquirientes en zona turística, excepto del desarrollador, desmotiva la inversión en el sector.

B)  Impuestos selectivos al consumo

El incremento de los impuestos a las bebidas contenido en la propuesta tributaria afecta particularmente al turismo. En el caso del consumidor dominicano estos renglones están catalogados como bienes de consumo suntuario, pero para el turismo, representan un insumo fundamental en su proceso productivo y en el segmento “todo incluido” es responsable de entre un 8% y 12% del costo total de operación. Esto afecta a los establecimientos de comida y bebida, hoteles y restaurantes.

Algo similar ocurre con los servicios de televisión por cable, que en el caso del mercado interno constituye un impuesto selectivo al consumo, pero para el hotel es un insumo productivo.

En cuanto al combustible de generación eléctrica, ante un mecanismo de devolución indefinido y que históricamente no se ha cumplido, conllevará un aumento directamente proporcional en el costo de generación estimado en 35%, afectando tanto a los hoteles que están en el SENI, como aquellos que se encuentran en sistemas aislados y los autogeneradores.

Las medidas afectarían las tarifas eléctricas del sector, que de por si son excesivas. El 85% del costo de kwh actual, corresponde a combustible.

C) ITBIS

El incremento al 18% de la tasa general de ITBIS constituye un duro golpe al sector, tomando en cuenta que ya la temporada está vendida en las condiciones previas; pero aún para el futuro, dado que, a diferencia del consumidor dominicano, al extranjero no se le puede trasladar el impuesto, pues tiene otras opciones que escoger, convirtiéndose en costo para le empresa turística.

Desde hace años ASONAHORES viene reclamando que al turista se le den las facilidades que existen en países que compiten con el nuestro. En particular, un ITBIS o IVA diferenciado para las actividades hoteleras y de servicio turistico, no mayor al 10% que tendría la particularidad de impulsar la actividad económica colateral a la de hoteles y empresas de servicios turísticos, vinculada a la expansión de un sector expuesto a la competencia internacional. Lejos de eso, ahora se propone subir y ampliar la base del ITBIS, lo que afecta los costos del paquete turísticos y deteriora más la competitividad del país.

D) Avtur

El sector reconoce la reducción del impuesto al AVTUR  de un 0.27 centavos de dólar por galón, va en la línea apropiada. Este es el único reglon en la propuesta tributaria que alivia la carga del sector. No obstante, queda intacto el impuesto de la ley 112-00, que es un impuesto especifico. Más aún al modificar el esquema de tributación de las zonas francas especiales, los beneficios en la reducción del impuesto al AVTUR se ven mermados por el incremento del valor de los servicios de rampa y de comida a bordo “catering” a las aerolíneas.

Vale la pena destacar, que la República Dominicana es signataria de un acuerdo internacional ante las Naciones Unidas, a través de la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional), donde todos los países signatarios, se comprometen a no gravar los combustibles de aviación.

ASONAHORES espera la compresión de las autoridades para que se atenúen los efectos perjudiciales que las medidas mencionadas tienen sobre el sector y su competitividad, en la seguridad de que si así se hiciera redundaría en beneficio de una economía más robusta y de las mismas finanzas públicas.