Gastón Azcárraga deja a su hijo Pablo la presidencia del Grupo Posadas

La junta de accionistas del Grupo Posadas ha designado a Pablo Azcárraga Andrade, luego que Gastón Azcárraga tras 20 años al frente de la mayor compañía hotelera de Latinoamérica, dejara la dirección y la presidencia Consejo de Administración del grupo en medio de fuertes polémicas y demandas judiciales y fiscales en su contra.

De acuerdo a la publicación de realestrategy.com, el ahora ex presidente afronta al menos seis demandas, entre las cuales destacan las entabladas por los sindicatos del sector aéreo y por el SAT por un presunto delito de fraude fiscal al retener al menos US$100 millones en impuestos. Además de afrontar otra denuncia bajo la acusación de no haber informado al público inversionista sobre dos créditos otorgados por Banorte y el Banco Nacional de Comercio Exterior.

Standard & Poor’s (S&P) redujo la calificación a Grupo Posadas por su debilidad financiera y el constante incremento de la deuda.

La historia de Gastón Azcárraga durante décadas lo coloca como uno de los empresarios turísticos más reconocidos. Su grupo hotelero fue sinónimo de expansión. Para el año  2005, cuando compró la aerolínea Mexicana de Aviación en US$165 millones se le veía una clara estrategia de realizar economías a escala entre la aerolínea y sus hoteles, con productos integrales para el turismo.

Esta percepción se derrumbó y la historia es otra, ya que ahora Gastón Azcárraga no sólo deja la dirección sino la presidencia del Consejo de Administración de Grupo Posadas en medio de una fuerte polémica al indicársele la venta de activos o la totalidad de su grupo hotelero.

La explicación de Posadas fue que se trataba de una capitalización. La realidad parece ser otra: se trata de un salvamento con marcas reconocidas pero con muy pocos activos reales, y lo peor, una deuda muy grande para el flujo de la compañía.

La venta se la han encargado a Rothschild, un banco inglés que se encarga de reestructura-ventas empresariales, tal y como sucedió con la reestructuración de la Controladora de Comercial Mexicana, cuando se metió en el lío de derivados.

La comunicación de la empresa explica los cambios como parte de un relevo generacional. Lo cierto es que la problemática que vive Posadas y Gastón Azcárraga, derivada de la administración de Mexicana de Aviación, parece ser la causa real. Incluso se ha llegado a rumorar que el Grupo Posadas se perfila hacia el horizonte inexorable de venta.

Por otra parte, la situación de Posadas se ha tornado muy difícil, con un apalancamiento cercano a los US$10,000 millones, de los cuales, poco más de una quinta parte son de corto plazo y vencen en abril del próximo año. De hecho, por esa razón la agencia calificadora Fitch Ratings redujo su perspectiva crediticia de “estable” a “negativa” desde fines del año pasado, aun cuando la empresa ha asegurado que está buscando el refinanciamiento de tales pasivos