Dimite director general del grupo de Air Europa y hoteles Be Live

Juan Arrizabalaga, quien hace seis meses asumió la dirección general de Globalia, deja el cargo por la imposibilidad de poner en marcha el plan estratégico para el que fue contratado por las diferencias entre los distintos miembros de la familia (Globalia nombra director general: Juan Arrizabalaga).

Arrizabalaga ya ha comunicado a Javier Hidalgo, consejero delegado de Globalia, su intención de dejar sus funciones con efectos inmediatos. La salida se produce de mutuo acuerdo, aunque según fuentes internas del conglomerado de la familia Hidalgo, el directivo no estaba conforme con la labor desempeñada en los seis primeros meses de contrato.

El directivo ha optado por abandonar el cargo al comprobar que varios miembros del consejo de administración echan abajo constantemente la aprobación del plan estratégico.

En concreto, María José Hidalgo, también con reconocimiento de consejera delegada, que se apoya en el director financiero, Miguel Angel Sánchez, para no aprobar las nuevas directrices aprobadas por su hermano y el propio Arrizabalaga, según el destacado medio Preferente.

A esta marcha se suma la de Andrés Álvarez quien asumió su cargo de director de Estrategia en febrero de 2018 y lo dejó el pasado mes de septiembre. Desde la compañía, indican que se debió a cuestiones personales.

La fuga de primeros directivos de Globalia ya es algo común en el conglomerado de la familia Hidalgo. Cabe recordar la dimisión del anterior director, Pedro Serrahima quien duró un año en el cargo y también alegó, al abandonar la compañía, la compleja relación familiar que impide llevar a cabo la estrategia y los planes de futuro.

En tanto, Globalia ha vendido la salida de Arrizabalaga como un despido por no haber cumplido con las expectativas que existían en el grupo turístico con su nombramiento. Esta es, al menos, la postura oficial de la empresa tras conocerse este mismo viernes que dejaba el cargo al no disponer de margen de maniobra para poner en marcha un plan estratégico debido, sobre todo, a la oposición de María José Hidalgo.

El propio Arrizabalaga comunicó que dejaba el cargo por el que había sido nombrado hace seis meses por falta de sintonía y un nulo entendimiento personal con la cúpula de la empresa, y una vez cumplidos los seis meses de margen que él mismo se había marcado para desarrollar una labor por la que teóricamente había sido contratado.

En un comunicado interno de la empresa, el grupo ha informado a la plantilla que Arrizabalaga deja su cargo como director general de Globalia este viernes y le agradece “el trabajo y la dedicación llevados a cabo durante estos meses” y le desea “los mejores éxitos en su próximo proyecto profesional”.

Con la marcha de Juan Arrizabalaga se repite la historia de Pedro Serrahima, que apenas duró un año en el mismo cargo y que se marchó en unas circunstancias similares. Tenía oposición interna para poner en marcha sus proyectos y, un año después, dejó el cargo pese a su estrecha amistad con Javier Hidalgo.