Nulas críticas a los abusivos precios de Copa Airlines

Estoy de acuerdo con lo que se publicó en este digital sobre la compañía Copa. Pienso que se ha sobredimensionado la importancia de la aerolínea panameña. Pero no solo por los asuntos expuestos en la información de arecoa.com, dado que para mí son menores en relación con los que yo voy a exponer.

Copa abusa de sus precios por el monopolio en muchas de sus rutas. Unos precios que fluctúan según el horario. Y en ocasiones de forma excesiva. Porque resulta un despropósito, más bien una perversión, cobrar casi 2,000 dólares en turista por volar a una hora determinada de Santo Domingo o Punta Cana a Cancún.

Se cobra ese precio desorbitado — la business de Iberia o Air France a Madrid o París cuesta lo mismo– solo por el mero hecho de despegar a media tarde. Es decir, que para volar con un coste muy inferior, pero no por ello nada barato, hay que viajar en vuelos de las 6 am… Ello implica levantarse en horas muy de madrugada.

Cuando Air Europa ejercía el monopolio de los vuelos regulares desde España, aquí se montó una gran polémica. La aerolínea de Juan José «Pepe» Hidalgo abusó de su posición de dominio y las críticas le llovieron desde todos los lados: autoridades, empresarios, medios informativos, intelectuales de la talla de Vega, etc.

¿Por qué hubo una reacción del todo lógica y comprensible contra Air Europa y por qué, sin embargo, todo el mundo calla con los precios más que elevados de Copa? Porque los pasajeros de una compañía y de otra son distintos. Los de la aerolínea española son en su inmensa mayoría trabajadores y los de la panameña profesionales.

Y los dominicanos de a pie arman más bulla, más presión que los profesionales. Por una sencilla razón: los primeros salen de RD camino de Europa en busca de un trabajo, mientras que los profesionales y los pequeños empresarios van o utilizan el hub de Tocumen a cuenta de sus empresas, esto es, no lo pagan de sus bolsillos y si son empresarios lo pasan a gastos.

Cuando los perjudicados son la gente del pueblo, a los políticos les falta tiempo para erigirse en defensores de sus derechos. Entonces se quejan ante las compañías de aviación que cometen abusos, ante la Junta de Aviación Civil, etc. Pero si son profesionales y además callan, pues los políticos se hacen los tontos. Los políticos y los que tienen poder.

El responsable de Copa dice siempre en su artículo de bienvenida de la revista de la compañía que ellos son los más puntuales de Latinoamérica. Cierto. Pero eso no basta. Porque una aerolínea líder ha de dar más y mejores servicios, acorde con el precio abonado por los trayectos. Y Copa es la línea más cara, con diferencia, y fija unos precios según les conviene. Hace falta, sin duda, un competidor para Copa que sirva de contrapeso.

Y los tripulantes, que son el espejo de la compañía, deben sonreír más. Sus colegas de Latinoamérica, desde Avianca a Aerolíneas Argentinas pasando por Gol e incluso Cubana, son más simpáticos. Sonreír es gratis. Air Europa recibió duras críticas cuando tenía el monopolio. Copa, que sigue ejerciéndolo, no. Lo cual es injusto.